miércoles, 7 de octubre de 2009

EL CENTRO PEDIATRICO abrira un nuvo punto de consulta en la Torre Elite del Centro Medico Puerta de Hierro Norte. En avenida empresarios 150, sexto piso, interior 601. Tel. 3848-4000.

lunes, 1 de junio de 2009

LA IMPORTANCIA DE LA AUDICION EN LOS NIÑOS



El examen auditivo de su bebé.
En las primeras semanas de vida, se someterá a su bebé a una serie de exámenes de salud de rutina. Estos pueden incluir exploraciones auditivas. Para realizar los exámenes auditivos se utiliza una rápida y simple prueba para comprobar la audición de todos los recién nacidos.
http://centrodeaudiometria.blogspot.com/
¿Por qué se le hace un examen auditivo a mi bebé?
Un reducido número de bebés nace con una deficiencia auditiva. No es fácil constatar una pérdida auditiva en un bebé tan pequeño. Estos exámenes permiten una detección temprana de aquellos bebés con un déficit auditivo. Se sabe que La detección temprana es importante para el desarrollo del niño. Esto quiere decir también que podemos ofrecer apoyo e información a los padres desde una fase temprana.
¿Nadie en mi familia tiene una deficiencia auditiva. ¿Aun así, necesitan someter a mi bebé a un examen auditivo?
En efecto. Es importante que todos los bebés se sometan a esta prueba. Uno o dos niños de cada 1000 nacen con una deficiencia auditiva en uno o en ambos oídos. La mayoría de estos bebés nacen en familias sin experiencia o historia de deficiencia auditiva.
¿Cuándo se va a realizar la prueba?
La prueba auditiva se lleva a cabo en las primeras semanas de vida. Es posible que se realice antes de que se le dé el alta del hospital.. En algunas zonas se realiza a domicilio o en la clínica local. Si a su bebé no se le ha realizado la prueba auditiva, hable con su médico de cabecera para que le concerten una cita.
¿Es la prueba dolorosa para mi bebé?
No. No es ni dolorosa ni molesta. La prueba se realiza normalmente cuando el bebé está dormido y es muy rápida. No se utilizan ni anestésicos ni sedativos.
¿En qué consiste la prueba?
El estudio es realizado por nuestro personal que esta entrenado para efectuar este estudio. Para ello, se coloca una pequeña pieza auricular de punta blanda en la parte exterior del oído del bebé, que envía pequeños chasquidos al interior del oído del bebé. Al recibir cualquier sonido, la parte interior del oído, que se llama cóclea, produce normalmente un eco. Con la ayuda de un ordenador, la persona que realiza la prueba puede ver como responden los oídos del bebé al sonido. Esto se denomina prueba de emisiones otacústicas. Otro estudio similar mide la captacion del sonido a base de un sistema que se llama potenciales evocados del tallo auditivo a traves de unos electrodos indoloros que se colocan en la frente, el cuello y la espalda.
La prueba lleva apenas unos minutos.
Puede permanecer con su bebé mientras que se realiza la prueba.
¿Cómo se interpretan los resultados?
Si las pruebas de exploración muestran una respuesta importante en ambos oídos:
Esto quiere decir que es poco probable que su bebé tenga un déficit auditivo. Tras la prueba, puede que se le proporcionen dos listas de los sonidos a los que su bebé debería reaccionar y de los tipos de sonidos que debería hacer a medida que va creciendo. Es importante ir verificando la audición de su hijo /a a medida que vaya creciendo. Si hay algo que le preocupe a este respecto, consulte con su médico de cabecera. Se puede comprobar la audición de su hijo /a a cualquier edad.
Si las pruebas de exploración no muestran una respuesta importante en uno o en ambos oídos:
Esto ocurre con frecuencia y no significa necesariamente que su bebé tenga una deficiencia auditiva. Existen varias razones por las que puede ser difícil comprobar la audición de su hijo /a. Puede que el bebé estuviera agitado cuando se realizó la prueba. Puede que tuviera líquido en el oído o que tuviera los oídos taponados temporalmente al nacer. Puede que hubiera ruido de fondo cuando se realizó la prueba. Se le pedirá que vuelva a traer al bebé para realizar más pruebas y se le facilitará un folleto donde se le explica en qué consisten.
¿Cuándo recibiré los resultados de las pruebas?
Normalmente se le informa de los resultados cuando se realizan las pruebas. Si tiene alguna inquietud o alguna pregunta acerca de los resultados, puede consultarlo con nosotros.
¿Dónde puedo obtener más información?
Póngase en contacto con nuestra secretaria del Centro Pediatrico quien la podra orientar para realizar esta estudio en nuestras instalaciones.

viernes, 24 de abril de 2009

ANSIEDADES, MIEDOS Y FOBIAS

ANSIEDADES, MIEDOS Y FOBIAS

  • La ansiedad y el miedo son normales
    La definición de la ansiedad es “una aprehensión sin una causa aparente.” Suele ocurrir cuando no existe una amenaza inmediata a la seguridad o el bienestar de una persona, pero sin embargo la amenaza se siente como algo real. La ansiedad hace que una persona quiera escapar de una situación –rápidamente. El corazón late con velocidad, el cuerpo puede que empiece a sudar y pronto la persona sentirá “mariposas” en el estómago. Sin embargo, un poco de ansiedad puede ayudar a las personas a mantenerse alerta y concentradas.
    Sentir miedo o tener ansiedad sobre ciertas cosas puede ser positivo porque hace que los niños(as) se comporten de una manera más segura. Por ejemplo, un niño(a) que tenga miedo al fuego evitará jugar con fósforos.
    La naturaleza de las ansiedades y de los miedos cambia a medida que los niños(as) crecen y se desarrollan:
    Los bebés experimentan ansiedad ante los extraños, abrazando fuertemente a sus padres cuando personas que no reconocen se acercan a ellos.
    Los infantes de 10 a 18 meses experimentan ansiedad debido a la separación, sintiéndose emocionalmente disgustados cuando uno o ambos padres se apartan de su lado.
    Los niños(as) con edades entre cuatro y seis años de edad sienten ansiedad respecto a las cosas que no se basan en la realidad, como por ejemplo, el miedo a los monstruos y a los fantasmas.
    Los niños(as) con edades entre los siete y 12 años generalmente tienen miedos que reflejan circunstancias reales que pueden ocurrirles como por ejemplo, lastimarse o enfrentar desastres naturales.
    A medida que los niños(as) crecen, un tipo de miedo puede desaparecer o ser reemplazado por otro. Por ejemplo, un niño(a) que no puede dormir con la luz apagada a los cinco años puede que disfrute un cuento sobre fantasmas años después al asistir a una fiesta. Algunos miedos pueden referirse únicamente a un cierto tipo de estímulo. En otras palabras, un niño(a) puede que quiera acariciar a un león en el zoológico pero ni soñaría con acercarse a acariciar al perro de un vecino.
    Reconociendo los síntomas de la ansiedad
    Los miedos típicos de la niñez cambian con la edad. Estos incluyen el miedo a los extraños, a las alturas, a la oscuridad, a los animales, a la sangre, a los insectos o a estar solo(a). Los niños(as) generalmente aprenden a tenerle miedo a un objeto específico o a una situación después e haber tenido una experiencia desagradable, como la mordedura de un perro o un accidente.
    La ansiedad a causa de la separación es muy común cuando los niños(as) pequeños comienzan la escuela; mientras que los adolescentes pueden experimentar un tipo de ansiedad relacionada con la aceptación social y los logros académicos.
    Si los sentimientos de ansiedad persisten, pueden afectar la sensación de bienestar de los niños(as). La ansiedad asociada con evitar situaciones sociales puede tener efectos a largo plazo. Por ejemplo, un niño(a) con miedo a de ser rechazado puede dejar de aprender ciertos hábitos para relacionarse en la sociedad, ocasionando que su aislamiento social.
    Muchos adultos se sienten atormentados por miedos que comenzaron a partir de experiencias en la infancia. El miedo de un adulto de hablar en público puede ser el resultado de haber sido avergonzado en frente de compañeros del colegio muchos años atrás. Es importante reconocer e identifique los signos y los síntomas de las ansiedades de sus hijos(as) para que la preocupación no sea excesiva.
    Algunos de los signos que pueden revelar la ansiedad de un niño(a) respecto a algo, pueden incluir:
    una actitud demasiado apegada, impulsiva o distraída
    movimientos nerviosos, como un tic temporal
    problemas para quedarse dormido(a) o lo contrario, dormir más de lo normal
    manos sudadas
    ritmo cardiaco y respiración acelerada
    nausea
    dolores de cabeza
    dolores de estómago
    Además de estos signos, los padres generalmente pueden darse cuenta de cuando su hijo(a) no se siente cómodo respecto a algo. Escucharles con atención siempre ayuda; algunas veces simplemente hablar sobre el miedo puede ayudar a un niño(a) a superarlo.
    ¿Qué es una fobia?
    Cuando las ansiedades y los miedos persisten, algunos problemas pueden surgir. Independientemente de cuánto un padre desee que su hijo(a) supere ciertos miedos, a veces lo contrario ocurre, y la causa de la ansiedad abarca más terreno y se hace más prevalerte. La ansiedad entonces se convierte en una fobia o un miedo que es extremo, severo y persistente.
    Una fobia puede ser difícil de tolerar, tanto para los niños(as) como para las personas que los rodean, especialmente si los estímulos que producen la ansiedad (cualquier situación u objeto que la motive) sea difícil de evitar (e.g., las tormentas).
    Las fobias "reales" son una de las principales causas por las que los niños(as) son referidos a los profesionales de la salud mental. Pero la buena noticia es que a menos que la fobia de un niño(a) impida su capacidad de funcionar diariamente, el niño(a) a veces no necesitará tratamiento con un profesional ya que con el tiempo la fobia desaparecerá.
    Enfocándose en las ansiedades, los miedos y fobias de su hijo(a)
    Intente contestar a las siguientes preguntas con honestidad:
    ¿Los miedos y el comportamiento que su hijo(a) demuestra son típicos de un niño(a) de su edad? Si la respuesta a esta pregunta es sí, es muy probable que los miedos de su hijo se resuelvan antes de que se conviertan en una causa para preocuparse. Esto no significa que la ansiedad debe ser ignorada u olvidada; en su lugar, debe ser considerada como un factor en el desarrollo normal de su hijo(a).
    Muchos niños(as) experimentan miedos apropiados para su edad, como el miedo a la oscuridad. La mayoría de los niños(as), con el apoyo humano y quizás una lámpara nocturna, superaran este miedo. Sin embargo, si el problema continúa o si existe ansiedad frente a otros temas, la intervención puede que tenga que ser más intensiva.
    ¿Cuáles son los síntomas del miedo y cómo afectan al funcionamiento personal, social y académico de su hijo? Si los síntomas pueden ser identificados y considerados en base a las actividades diarias de su hijo(a), pueden hacerse ajustes para aliviar algunos de estos factores de tensión.
    ¿Parece el miedo poco razonable en relación a la realidad de las situaciones, y pudiera ser un signo de un problema más importante? Si el miedo de su hijo(a) parece estar fuera de proporción con lo que ocasiona su preocupación, esto puede ser una señal de que es necesaria la ayuda de un consejero, un psiquiatra o un psicólogo.
    Es una buena idea que los padres busquen patrones de comportamiento. Si un incidente aislado se resuelve, los padres no deberían hacerlo más significativo de lo que fue. Sin embargo, si existe un patrón persistente o si surge uno que trascienda, usted debe intervenir. Si no lo hace, es posible que la fobia influya sobre su hijo más adelante.
    Usted puede contactar con el doctor de su hijo(a) o con un profesional de la salud mental con la experiencia para trabajar con niños(as) y adolescentes.
    Cómo ayudar a su hijo(a)
    Los padres pueden ayudar a sus hijos(as) a desarrollar los elementos y la confianza en sí mismos para superar los miedos evitando que se conviertan en reacciones fóbicas. A continuación detallamos algunos consejos para que usted pueda ayudar a su hijo(a) con los miedos o ansiedades que pueda tener:
    Reconozca que el miedo es real. Tan trivial como parezca, para su hijo(a) es real y está causando que sienta ansiedad y miedo. Ser capaz de hablar sobre el miedo ayuda – las palabras a veces le quitan el poder a los pensamientos negativos. Si usted habla acerca de ello, el miedo puede ser menos poderoso.
    Nunca opine que el miedo es insignificante para forzar a su niño(a) a que lo supere. Decirle a su hijo(a), "¡No seas ridículo! ¡No hay monstruos en tu closet!" puede que haga que su hijo vuelva a la cama, pero no hará que el miedo desaparezca.
    No se rinda ante los miedos. Si a su hijo no le gustan los perros, no cruce la calle a propósito para evitar encontrarse con un perro. Este comportamiento fortalecerá el pensamiento de que los perros deben evitarse. Brinde apoyo y demuestre protección a medida que se acerque con su hijo(a) al objeto o situación que genere temor.
    Enseñe a su hijo(a) a cómo evaluar el miedo. Si su hijo(a) puede visualizar la intensidad del miedo en una escala del uno al 10, con el número 10 como el más fuerte, él o ella puede que "vean" al miedo con menos intensidad de lo que originalmente imaginaron. Los niños(as) más jóvenes pueden pensar en sentir miedo "hasta las rodillas" como algo no muy temido, "hasta el estómago" como algo más temido y "hasta la cabeza" como petrificado.
    Enseñe a sus hijos(as) estrategias para hacer frente al miedo. Intente estas técnicas fáciles de implementar. Utilizándolo a usted como la "base” el niño(a) puede atreverse a acercarse al objeto temido y luego volver a acercarse a usted en busca de seguridad antes de volverse a cercar al objeto o situación temida. Los niños(as) también pueden aprender frases positivas sobre sí mismos(as) como por ejemplo "Yo soy capaz de hacer esto" y "Yo voy a estar bien," las cuales su hijo(a) puede repetirse a sí mismo(a) cuando sienta ansiedad. Las técnicas de relajación también ayudan, incluyendo la visualización (flotar sobre una nube o descansar en la playa, por ejemplo) y respirar profundamente (imaginando que los pulmones son globos y dejar que se desinflen lentamente).
    La clave para resolver los miedos y las ansiedades es superarlas. Utilizando estas sugerencias, usted puede ayudar a que su hijo(a) lidie con las situaciones de la vida.

jueves, 16 de abril de 2009

CURSO DE PRIMEROS AUXILIOS PEDIATRICO

PROXIMO CURSO DE PRIMEROS AUXILIOS
FECHA: Marzo 4del 2010.
HORA: de 16 a 20 hrs.
SEDE: Colegio Mexico Nuevo, Santa Anita

FECHA: Abril 24 del 2010
HORA: de 8 a 14 hrs
SEDE: Museo Interactivo del niño "Trompo Magico", Zapopan, Jal cupo limitado

CONTACTO. Dr. Eduardo Velasco
TEL. + 52 (33) 3641 6015
CORREO ELECTRONICO: centropediatrico@prodigy.net.mx